TC 9-4-1972 PERGAMINO: PININO Y FARAONI (p)

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9 abril, 2019

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GRAN SERIE DE PININO Y FINAL DE FARAONI

Pinino Paoloni 3° en
la serie no pudo largar la final

Premio: Supermovil Hidrogenado YPF

Circuito: Triangulo chico 9332,60 mts.

Recorrido: 3 series clasificatorias de 8 vueltas, final 30 vueltas

En las tres rectas y las tres curvas dél circuito de Pergamino, en un trazado diametralmente opuesto al de hace dos semanas en Mendoza, los impresionantes Falcon preparados por Herceg cumplieron como con carbónico la aplastante demostración de quince días atrás. Nasif, Gradassi y Ricardo Iglesias (el hermano de Juan Carlos) se repartieron las series y dominaron por completo el panorama de la final, donde Nasif Estéfano —luego de años— volvió a triunfar en TC, recuperando esa alegría de ganar que nunca le fue muy asidua al turco y que por tanto le proporcionaron tantas simpatías.

Su triunfo sin embargo era casi previsto.

Si en Mendoza los Ford habían mostrado tal supremacía y fue Pirín Gradassi el ganador, lógico era suponer ahora que le tendría que tocar a Nasif. Terminadas las tres serles previas (clasificatorias para la final) la dirección del equipo Ford eludió responder sobre a quién mandarían a ganar y la decisión no parecía fácil con tres ganadores rotundos en cada una de las series.

De todos modos Nasif había sido el dueño de la serle más veloz y debía ser evidentemente el candidato a buscar la punta de entrada.

Así fue en la práctica, aúnque Gradassi lo cubría de cerca y el segundo hermano Iglesias (tan superlativo como el primero en su debut) completaba el terceto que copó el domingo. Luego Gradassi tuvo que detenerse y Nasif quedó solo adelante. Pero ya la carrera era de él y pese a que el circuito de Pergamino no le agrega «pergaminos» a nadie en cuanto a manejo, hay que destacar que el Turco corrió con las condiciones y el ritmo que él posee desde hace tanto y para los cuales esta carrera no fue de las más exigentes. Aunque si de las que más satisfacción le debe haber brindado.

Si bien hubo más coches que en Mendoza, es cierto que la cifra de autos presentes en la carrera de Pergamino no era todo lo frondosa que se esperaba.

El resultado sin embargo fue bueno.

Por otra parte, se producía el debut de la flamante Coupé Chevrolet, en manos de Carlos Marincovich, siendo la primera en la categoria, mientras que los Torino penaban por la falta de renombres, ante las ausencias de Di Palma, Perkins, Bertolino y Copello, teniendo en cuenta el retiro del apoyo oficial de IKA.

Mientras tanto, se hacian presentas dos Fiats coupé, en manos de los novatos Alcides Gómez y Osvaldo Santacroce.

Faraoni Padre 4° en la serie 7° en la final, aqui seguido por los Hnos Suárez

Series

Solo sirvieron para el ordenamiento de los coches en la final, y no aportaron ningún elemento fuera de lo común en tres trámites interesantes y aceptablemente cortos.

En la primera serie el triunfador fue Ricardo Iglesias hermano de Juan Carlos (e hijo del campeonísimo Jesús Ricardo Iglesias) y con ese debut triunfal selló por primera vez en el día la característica victoriosa de Ford que se prolongó luego incesantemente. En esa primera serie, Iglesias no tuvo mayor lucha y en parte por eso fue la más lenta del día.

En la segunda y tercera Nasif y Gradassi casi se empatan el tiempo para las ocho vueltas en sus respectivos paseos sin rivales a la vista. Marincovich y Malnatti nada pudieron contra él Turco en la segunda parte y lo mismo sucedió con Machado, Loeffel y Faraóni que escoltaron de lejos a Gradassi en la serie final. Durante el transcurso de su serie, abandonaba uno de los emblemas de Chevrolet como era Néstor García Veiga por rotura de la caja de cambios.

Todo el mundo entonces preparó las herramientas para utilizar la media hora de reparaciones y el optimismo pleno reinaba por los boxes de Ford, a quienes se les adjudicaba desde entonces el presunto triunfo final, mientras aprovechaba Loeffel para cambiar el cardan.

Primera serie

1º 32 Ricardo Iglesias Ford Falcon 28m07s1 8v

2º 1 Juan Manuel Bordeu Dodge cupé

3º 35 Raúl Paoloni Torino

4º 23 Jorge Martínez Boero Chevrolet

5º 14 Antonio Lizeviche Torino

6º 47 Héctor Ríos Chevrolet

7º 38 O. Santacrocce Fiat 7v

8º 29 H. Pasciulli Chevrolet

9º 10 R. Marincovich Chevrolet

10º 4 N. Garcia Veiga Chevrolet 6v

11º 44 Luis Barragan Dodge 4v

12º 26 Jose Santagatti Torino 3v

13º 50 Ruben Gil Biscella Torino 1v

14º 20 Ruben Lence Valiant No registro paso

Promedio del ganador: 159,314 km/h.

Récord de vuelta: Ricardo Iglesias en la segunda vuelta con 3m25s2, a un promedio de 163,129 km/h.

Nasif Estéfano ganador de su serie y la final Pergamino 72

Segunda Serie

1º 8 Nasif Estéfano Ford Falcon 27m27s 8v

2º 2 Carlos Marincovich Chevy cupé

3º 5 César Malnatti Torino

4º 33 Emilio Parisi Torino

5º 27 Raúl O. Rodríguez Chevy

6º 39 Juan Carlos Gomez Torino 7v

7º 21 Juan Luluaga Dodge 6v

8º 11 Francisco Espinoza Torino 4v

9º 51 Daniel Pierella Torino 2v

10º 15 Juan Marconi Torino 1v

11º 36 Roberto Mouras Torino 1v

12º 48 A. Gomez Fiat No registro paso

Promedio del ganador: 163,014 km/h.

Récord de vuelta: Nasif Estéfano, en la quinta, con 3m21s5 a un pro¬medio de 166,736 km/h.

Raúl Oscar Rodriguez acompañado de Carlos Torres Vila, Pergamino 72

Tercera Serie

1º 3 Héctor Luis Gradassi Ford Falcon 27m28s9 8v

2º 16 Juan Rubén Machado Torino

3º 6 Carlos W. Loeffel Dodge cupé

4º 9 José Manuel Faraoni Torino

8º 49 Eduardo Giordano Torino

6º 22 Carlos Tártara Torino

7º 31 Rodolfo Mariani Torino

8º 12 «Hermanos Suárez» Dodge

9º 43 Gustavo Duran Chevrolet

10º 19 Francisco N. Ocampo Torino

11º 40 Carlos Nani Ford Falcon 4v

12º 37 Juan Ayarza Garre Torino 3v

13º 52 Juan C. Vazquez Dodge 2v

Promedio del ganador: 163,004 km/h.

Récord de Vuelta: Héctor Luis Gradassi en la tercera con 3m22s8 a un promedio de 165,667 km/h.

Final

¿Nasif o Gradassi? De entrada no más se destacó adelante el tucumano y Gradassi detrás como cuidándole las espaldas, los dos, a su vez, SG empezaron despegarse del resto y tercero a veces segundo por tiempo3 se ubicó el otro fordista, Ricardo Iglesias de manera tal que las predicciones de las serles se cumplían a la perfección. Bordeu y Rody Marincovich (primo de Carlos, atendido en el chasis por el ingeniero Gustavo Durán) completaban el quinteto de las cinco primeras posiciones y cuando Gradassi se detuvo por dos vueltas, Loeffel tenía problemas en el diferencial y Bordeu abandonó definitivamente, Rody Marincovich comenzó a avanzar paulatinamente hacia el segundo puesto que resignó Iglesias cuando su auto bajó un poco el rendimiento.

A esta altura de la carrera pasada la mitad de la final las tres curvas de primera, donde hay que frenar totalmente, se fueron llenando de aceite lo que en consecuencia produjo un notable incremento de cruzadas, trompos, semitrompos y demás Incidencias que no llegaron a inquietar nunca a nadie porque a esa velocidad no puede pasar nada, concitaron el interes de la gente que supo ver y premiar con aplausos a quíenes sabían sortear de mejor manera las situaciones imprevistas, entre los primeros en los rankings de aplausos estuvieron el Nene García Veiga (siempre fuerte), el marplatense Mariani y el mismo Malnatti que varias veces logró controlar lo que ya parecía un trompo irremediable.

En una de esas figuras de ballet sobre el asfalto, perdió segundos preciosos el ingeniero Gustavo Duran que con el otro Chevrolet del equipo Plavinil estaba realizando una carrera notable. Lo mismo quedó sexto pero sin ese trompo de por medio podría haber estado adelante.

Todos esos arabescos no hacen sino configurar uno de los principales clásicos del TC que es el entretenimiento visual en curvas de ese tipo que nada demuestran porque son absolutamente ingenuas. No es un circuito para contrapesar HP con manejo y eso lo saben todos. Principalmente Nasif y Pirin que fueron precisamente los que nunca se descontrolaron sobre un piso cada vez más resbaladizo en las zonas criticas, que nunca anduvieron con el auto fuera de lugar y en cambio siempre marcaron los mejores registros en los relojes.

Eso es en definitiva lo que vale, en TC como en cualquier otra carrera.

Como espectáculo global, logrado. Día bárbaro, buena cantidad de autos, una carrera lógica y un ganador merecido. O sea todo en orden. Orden que por el momento parece llamarse irremisiblemente Ford y que deberá exigir mayores desvelos de los rivales para las futuras carreras donde evidentemente Ford es ahora favorito.